En el siguiente artículo encontrarás razas de gatos que llamarán tu atención por su apariencia salvaje. Pero no solo tienen el aspecto salvaje, sino que además son producto del cruce de gatos domésticos con felinos salvajes. Con el objetivo de conseguir un gato parecido a los grandes felinos, pero con la docilidad suficiente para formar parte de nuestros hogares.
Tabla de contenido
A continuación 5 razas de gatos con antepasados salvajes:
El Gato Savannah
Es uno de los gatos más grandes del mundo. Es producto del cruce entre una gata doméstica (siamesa) y un gato africano salvaje (Leptailurus serval). Su personalidad varía según el número de generación a la que pertenezca. Es decir que será más salvaje y de gran tamaño, cuanto más próximo se encuentre a su antecesor serval.
Por eso encontramos gatos Savannah con un lado más salvaje, por lo que son más activos, desconfiados, curiosos, saltadores y trepadores, que escabullen para salir al exterior y cazar ratones. Pero también hay ejemplares con una personalidad cariñosa, calmos y mansos. Es una raza muy activa, por lo que es importante que tengan a su disposición espacios abiertos para que se pueda ejercitar y descargar el exceso de energía.
El gato Chausie, oriundo de Egipto
Se trata de una raza híbrida, que surge del cruce de un gato doméstico de pelo corto con el gato salvaje Chaus. De este último deriva su nombre.
El gato Chausie tiene una figura estilizada, esbelta y musculosa. A pesar de ser gatos domésticos, tienen un lado más salvaje que se hace notar. Son inquietos y excesivamente activos, necesitan mucha actividad y ejercicio. Les gusta correr, trepar, cazar, jugar mucho y escalar árboles o armarios, por lo que requiere pasar tiempo en espacios abiertos o grandes.
Tiene un carácter reservado, independiente y en general es testarudo. No manifiesta miedo ante nada, por lo que se exponen a peligros sin importarle el riesgo que pueda correr. Tiene poca paciencia con los niños y no se lleva bien con otros animales. Pueden llegar a atacar si se sienten intimidados.
El gato Bengalí o Bengala
Tiene un manto atigrado, que le brinda la apariencia de un jaguar o leopardo en miniatura. Es el resultado de la cruza de un gato atigrado doméstico con una gata leopardo nativa de Asia. El nombre de la raza proviene del nombre científico (Prionailurus bengalensis) de la hembra “gata leopardo” que se utilizó en la cruza.
El resultado fue un gato con el manto similar al de un leopardo, con un lado aventurero y salvaje como su antepasado, pero con la tranquilidad y docilidad de un gato doméstico. El gato de Bengala tiene huesos pesados, es robusto, fuerte y musculoso. Es un felino activo, astuto y curioso, que le gusta investigar todos los espacios de la casa y puede realizar algunas travesuras. Le encanta nadar, como también saltar, correr y trepar hacia los lugares más altos.
Se mantiene alerta y observador constantemente, es hiperactivo, por lo que necesita pasar tiempo en el exterior. Pero hay que remarcar que tiene una personalidad cariñosa y sociable, se lleva bien en la convivencia con otras mascotas y es un fiel compañero de su dueño, siempre lo esperará en la puerta cuando vuelva, y se acurrucará junto a él.
El gato bengalí es tan popular por sus bellos rasgos que se lo utilizó para dar origen a nuevas razas, como el Serengueti y el Toyger.
Se los considera felinos híbridos, si bien no se utilizó un gato salvaje directamente, el gato Bengalí (Prionailurus bengalensis x Felis silvestris catus), si tiene un antepasado salvaje.
El gato Serengeti
Surgió en California en el año 1994. Para esto se cruzó a un Bengalí y una gata Oriental. El resultado fue un gato con aspecto salvaje, pero dócil como un gato doméstico. Como rasgos principales presenta pelaje atigrado con manchas marrones en el lomo color café, patas largas, cuello largo, ojos redondeados y unas grandes orejas.
Son gatos cariñosos y sociables, forman fuertes vínculos con sus dueños. Cabe destacar que son muy activos, juguetones y enérgicos, les encanta saltar desde lugares altos y correr a través de la casa a toda velocidad.
El gato Toyger
Es una raza de cuerpo robusto, atlético y con un pelaje atigrado (naranja con rayas) que le da la apariencia de un tigre en miniatura, de allí su nombre. En este caso la raza es el fruto de años de trabajo de la criadora, para conseguir un gato doméstico con la apariencia de un tigre. Para esto cruzó sus gatos bengalies, con un gato doméstico atigrado mackerel, y un gato de la India.
Es un gato fuerte, de tamaño mediano y huesos grandes. Pero su aspecto salvaje, no tiene relación con su personalidad dócil, dulce y juguetona. Le agrada pasar tiempo con su amo. Puede convivir en familias con niños y también con mascotas.
Si al terminar de leer la nota seguís interesado en alguna de estas razas, tienes que tener presente que en su personalidad encontraremos un mix de rasgos, de gato doméstico y salvaje. Por lo que es fundamental realizar la socialización del gato desde pequeño, para lograr una mejor convivencia entre todos los integrantes de la familia.
Síguenos en nuestras redes sociales: