El Van Turco es una raza de gatos con pelo semi largo, creada en el Reino Unido con la selección de gatos obtenidos de varias ciudades de la Turquía moderna. Son gatos grandes, musculosos y de porte elegante. Les encanta el agua, son inteligentes y juguetones. Por su juego brusco no es recomendable para familias con niños muy pequeños.
- Nombre científico: Felis Silvestris catus.
- Otros nombres: Gato Turco, Turkish Van, Turkish Cat, Gato nadador turco.
- País de origen: Reino Unido.
- Reconocido por: WCF – FIFe – CFA – TICA.
- Tamaño: Grande.
- Color de ojos: Azul, ámbar o también uno de cada color.
- Peso: Entre 6 y 8 Kilos.
- Carácter: Activo, extrovertido, afectuoso y curioso.
- Actividad: Alta.
- Alborotador: Moderado.
- Aseo: Moderado.
- Pérdida de pelaje: Moderado.
- Esperanza de vida: 15 a 18 años.
Tabla de contenido
Más sobre el gato Van Turco:
♦ Origen:
El Van Turco, debe su nombre a que son gatos originarios del lago Van, de Turquía. Dos mujeres británicas, Sonia Halliday y Laura Lushington, viajaron en 1955 a Turquía. Allí consiguieron y se llevaron a su casa unos gatos que presentaban el patrón Van. Los criaron y utilizaron como base para la raza.
Fue nombrado “gato turco”, cuando se le otorgó el reconocimiento por primera vez en 1969. Este nombre se cambió a Van turco, en 1979 en el Reino Unido, para diferenciar mejor la raza del gato Angora turco que tuvo su origen en Ankara.
En el año 1982 el gato Van turco llegó a Estados Unidos y fue reconocido por la CFA en 1994. Si se rastrea la descendencia de cualquier Van Turco llegaremos hasta los gatos importados de Laura Lushington.
Hay una leyenda que tiene dos versiones, una islámica y otra judía, que explica el origen de estos felinos hace cientos de años y sus peculiares manchitas características. Se cree que este gato viajaba en el arca de Noe y salió en busca de tierra firme. Su grueso abrigo y hermoso pelaje se debe a las bajas temperaturas en las que se desarrolló.
En la versión judía se dice que Dios toco la cabeza y cola del gato cuando estaba en el arca. Mientras que, en la versión islámica, habla de Ala. Quien toca la espalda del Van turco y le deja la mancha en su espalda, que se reconoce como la huella digital de Ala. Ambas versiones coinciden que estos gatos fueron consecuencia de un toque divino que le dio origen a su característico pelaje y belleza.
♦ Particularidades físicas:
Tiene un pelaje parecido al de un conejo. La falta de una capa interna le da una apariencia elegante. Son gatos grandes y musculosos. Debe presentar hombros anchos con un cuerpo pesado. Pueden medir un metro de largo desde la nariz hasta la punta de la cola. Se distingue por el patrón Van (llamado así por la raza), el color solo se limita a la cabeza y la cola, todo el resto del gato es blanco.
Cuerpo
- Torso: Fuerte, robusto y largo.
- Patas: Piernas de longitud media, las traseras son un poco más largas que las delanteras. Pies redondeados.
- Cola: Medianamente larga, cubierta de anillos pálidos haciendo juego con sus manchas.
- Musculatura: Considerable y bien marcada.
Cabeza
- Estructura: Triangular, suavemente redondeada.
- Orejas: Medianas a grandes, separadas entre sí. Anchas en la base y ligeramente redondeadas en la punta.
- Ojos: Grandes y ovalados, ligeramente oblicuos.
- Morro u hocico: Redondeado y proporcionado a la cabeza.
Pelaje
- Tipo: Semi largo, textura fina y sedosa. Sin capa interior.
- Patrón: El color de fondo es blanco. Cola y manchas de la cabeza de color castaño, rojizo o crema.
- Colores: Naranja, azul, negro, castaño, tortuga, crema.
♦ Personalidad:
Los gatitos van turcos son inteligentes, amigables, leales y amorosos, resultan excelentes compañeros. Son gatos alegres, que les gusta jugar con humanos y con otros gatos. Tienen voces suaves y son muy equilibrados tanto en su temperamento, como en su forma de actuar.
Son tranquilos, pero también se activan y demandan juegos, y actividades de toda clase. Con una buena educación del gato Van turco cuando es pequeño, será posible disfrutar de una mascota única al crecer.
♦ Comportamiento doméstico:
No es recomendable para familias con niños muy pequeños, esto se debe a que son musculosos y suelen pararse sobre sus patas traseras cuando se sienten desafiados y juegan de forma brusca.
Su temperamento está marcado por su inteligencia y por la capacidad de generar una relación muy estrecha con su familia. Son sociables y fáciles de entrenar, aunque en general obedecerán solo a la persona que elijan como preferida.
♦ Salud:
No hay enfermedades específicamente asociadas a esta raza. Como todas las razas, los van turcos necesitan vacunaciones, control antiparasitario y un chequeo veterinario anual.
♦ Nutrición:
Es aconsejable una dieta balancea para que reciba todos los nutrientes. Hay que tener presente la importancia del juego y de la socialización como parte de su crianza, también procurar que se ejercite a nivel físico y mental cada día, para que así se convierta en un gato sano y equilibrado en todos los niveles.
♦ Cría:
La gestación dura entre 65 a 67 días, y nacen entre 1 y 10 crías. Al llegar a los 4 o 5 meses de edad, las gatas ya alcanzan la madurez sexual. En el caso de los machos esto sucede más tarde, entre los 6 o 7 meses.
♦ Aseo:
El van turco necesita un cepillado diario para mantener su precioso pelaje sedoso y libre de enredos. Si el aseo con peine y cepillo se comienza a realizar a una temprana edad, el gato se acostumbrará enseguida.
♦ Curiosidades del Van Turco:
Es una de las pocas razas a las que le gusta el agua. Son buenos nadadores y se zambullirá en una piscina si tiene la oportunidad, por lo que es común ver a un gato Van turco nadando.
Una característica que hace distintiva a esta raza es el patrón Van (llamado así por la raza), el color solo se limita a la cabeza y la cola, todo el resto del gato es blanco: Esto es consecuencia del gen “piebald white spotting”, un tipo de leucismo parcial.
Hay que localizar criadores profesionales y especializados, porque no es una de las razas más demandadas del mundo.
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